Un poco de nostalgia

Siempre que cocino pongo la radio, por eso de que se me haga un poco más llevadero el trabajo. Y ayer mientras me peleaba con unas albóndigas, escuché esta canción. Hacía muchísimos años que no la oía y me encantaba y al hacerlo, la imagen de Boy George con sus trenzas, su excentrico maquillaje o sus extrañas ropas me trajo a la mente un montón de sensaciones.



Culture Club, George Michael, Madonna, Michael Jackson, The Police y por supuesto Alaska, Los Secretos, Nacha Pop, Loquillo o La Unión, por poner solo un pequeño ejemplo me acompañaron durante toda mi adolescencia y juventud. Eran los tiempos del vinilo, aquel que uno compraba y luego pasaba de mano en mano para terminar en cintas de casette. Tiempos en el que el teléfono no se llevaba en el bolso, sino que se quedaba en casa, esperando a que llegáramos para inmediatamente llamar a las mismas amigas que acabábamos de dejar, para exasperación de nuestros padres. Escuchando canciones como estas he fumado mis primeros cigarrillos, me he tomado mis primeras copas o descubrí y sentí lo que es el amor. Tiempo de amistad, pero de la buena, de la que aún hoy, más o menos 25 años después, sigue siendo un referente en mi vida. De primeras y marcadoras experiencias. De sueños y esperanzas puestas en un futuro que veíamos lejanísimo y que inexorablemente acabó llegando para cumplir algunos, romper bastantes y transformar los que más, que de todo tengo en mi haber.

Una pena que haya acabado así.