El paso del tiempo

,El tiempo pasa y no devuelve lo que se lleva. Nadie es su dueño y nadie lo puede controlar. Puede parecer eterno, tanto como tarda en llegar aquello que deseamos tan fervientemente o parecer casi efímero cuando por fin lo tan deseado han llegado. Pero de una manera o de otra sigue su camino y nunca se detiene. Puede ser nuestro aliado y curar heridas, o por lo menos hacer que te acostumbres a ellas, pero también destroza ilusiones. Hace que se fortalezcan los amores, pero enfría relaciones. El tiempo me ha regalado tristezas porque algunos a los que amaba ya no están, pero también me ha dado la alegría de ver crecer y madurar a mi lado a los que sí, y ahora de pronto y casi sin darme cuenta, puedo cambiar los zapatos con mi hija o es mi hijo el que me saca un cabeza a mí.

Lo que es cierto es que pasa deprisa, demasiado. Aunque afortunadamente, no tan rápido como nos muestra Luis Caldevilla, creador de Timelapses. Realiza secuencias de vídeo con fotografías tomadas cada más o menos 5 segundos, con el espectacular resultado que nos muestra, entre otros, en este sobre Madrid. Fantástico.