De pulpos y tiburones

Como veréis no os traigo un estreno cualquiera. Este verano ni Harry Potter, Transformers 2, Malditos Bastardos, Ice Age, ni gaitas por el estilo. No. El estreno más espectacular del verano se llama... ¡¡¡Mega Shark vs. giant octopus!!!

Y yo me la quería perder. Bueno, es que hasta hoy ni me había enterado. Creo que cuenta con un argumentazo que gira sobre dos criaturas prehistorias (y con ello de tamaño descomunal que una cosa debe ir con la otra), que como no os habrá costado adivinar son un megatiburón y un pulpo gigante (que por cierto, a mi me salen divinos a la gallega, y con este tendría para unos cuantos años) que lucharán a muerte sembrando el terror allí por donde vayan. ¿A que ya engancha? Pues aún queda lo mejor. El protagonista es nada más ni nada menos que Lorenzo Lamas, el aclamado Rey de las Camas o más conocido por Lance Cunson, nieto de la malvada Angela Channing de Falcon Crest. Nerviosita me he puesto solo al saberlo.

Impresionante. Los malvados bichos son capaces de atacar aviones en pleno vuelo, sí como lo oís, comerse puentes o submarinos y que sé yo cuantas fechorías más. Y no será porque yo no vea con gusto películas de lo más inverosímil, que todavía no he visto a nadie volando montado en una escoba y no por ello me pierdo una de Harry, pero vamos que todo tiene un límite.

Creo que la única manera de verla sería gratis, con un par de copas de whisky (dobles), en buena compañía, de noche y con los niños fuera de casa, con lo cual no creo que viera más que el principio y el final. Y creo que ni aún así.

No sé cuando la estrenan en España, pero si me entero prometo no decir nada.