Felicidades

22 de diciembre. Hoy empieza la Navidad, con el sorteo y las voces de los niños de San Ildefonso. Aunque yo ya tengo hace días la casa adornadita por obra y gracia de mi hija que se ha encargado de ir poniendo espumillón por los sitios más insospechados de la casa. Yo ya no tengo ganas. Cada año me gusta un poco menos. Tengo la sensación de que cada año que pasa me pesa más todo que me falta en estas fechas: me falta mi padre que nunca más volverá a pasar unas fiestas con nosotros, me falta mi hijo que este año ha decidido no pasar ni una sola fiesta conmigo, me falta mi hija aunque solo sea en Nochebuena ya que las pasará con su padre, me falta su hijo (el de mi hija no, el de Adolfo), que también ha decidido no pasar las fiestas aquí. Hasta echaré un poquito de menos a mis hermanos que, desde que murió mi padre, pasan las navidades muy lejos de Madrid y su familia. Y encima cuando acaben tendré, como cada año, menos dinero y algún kilo de más.

En fin, lo dicho, que hoy empieza la Navidad. Pero también tengo una alegría. Hoy hace ocho años que decidimos emprender un camino juntos, con todas las dificultades que veíamos avecinarse. Y que, por supuesto, llegaron, ¡faltaría más!. Pero las superamos y aquí estamos, en el primer día del noveno año. A ti, muchas felicidades y a por el siguiente.

A todos los demás, os deseo lo mejor y que tengáis unas felices fiestas.